Los papás del bebé británico de 11 meses en estado terminal, Charlie Gard anunciaron hoy por medio de su legan, que no seguirán adelante con la batalla legal que mantenían para poder llevar a Estados Unidos a su hijo para someterlo a un tratamiento con una terapia de nucleósidos experimental.
Su padre declaró que Charlie “estará con los ángeles” y lamentó que “se ha desperdiciado tiempo”. En cuanto a la posible fecha para que desconecten las máquinas que lo tienen en vida, la familia indicó que Charlie no llegaría a su primer cumpleaños, que es el próximo 4 de agosto.
El abogado de la familia, Grant Armstrong, dijo: “Tristemente, el tiempo se ha agotado” para poder tratar al pequeño que padece el síndrome de depleción de ADN mitocondrial.
Los últimos análisis médicos registran que no tiene ninguna función activa, y los daños son “irreversibles”.