Observatorio Vaticano
  • Portada
  • Vaticano
  • La Iglesia
  • Audiencia y Angelus
  • Actos Pontificios

El hombre debe renunciar a “construirse” un dios a su medida, dice el Papa

6/20/2011

0 Comments

 
ROMA, (ZENIT).- El hombre debe lograr vencer la tentación de construirse un “dios comprensible y a su medida”, y fijar la mirada en la cruz, donde Jesucristo, del que Moisés es figura, se anonada a sí mismo para que el hombre se salve.

Así lo afirmó el Papa Benedicto XVI, en esta nueva catequesis sobre la oración, que esta vez realizó a partir del pasaje del éxodo en el que el pueblo de Israel traiciona al Dios que le libró de Egipto construyéndose un becerro de oro al que adorar.

“Cansado de un camino con un Dios invisible”, ahora que “Moisés, el mediador, ha desaparecido”, el pueblo pide “una presencia tangible”, un dios “ accesible, manipulable, al alcance del hombre”.

“Esta es una tentación constante en el camino de la fe: eludir el misterio divino construyendo un dios comprensible, que corresponda a los propios esquemas, a los propios proyectos. Todo lo que sucede en el Sinaí muestra toda la necedad y vanidad ilusoria de esta pretensión”, explicó el Papa

Benedicto XVI explica, frase a frase, el diálogo de Dios con Moisés en la cima del Sinaí, cuando éste intercede por el pueblo.

Con la amenaza del castigo, explicó el Papa, Dios empuja a Moisés a interceder por los israelitas, para poder perdonarlo y llevar así a cumplimiento la obra de salvación y manifestar su verdadera realidad a los hombres.

“La oración de intercesión hace operativa de esta manera, dentro de la realidad corrupta del hombre pecador, la misericordia divina, que encuentra su voz en la súplica del que reza y se hace presente a través de él donde hay necesidad de salvación.”.

La salvación de Dios, “implica misericordia”, afirmó el Papa, pero “siempre denuncia la verdad del pecado, del mal que existe”, para que “el pecador, reconociendo y rechazando el propio mal, pueda dejarse perdonar y transformar por Dios”.

“La obra de salvación que se ha comenzado debe ser completada; si Dios hiciese perecer a su pueblo, esto podría ser interpretado como el signo de una incapacidad divina de llevar a cumplimiento el proyecto de salvación”.

Dios, afirmó el Papa, “no puede permitir esto: Él es el Señor bueno que salva, el garante de la vida, es el Dios de misericordia y de perdón, de liberación del pecado que mata”.

Desde su experiencia concreta del Dios de salvación, Moisés “apela a Dios, a la vida interior de Dios contra la sentencia exterior”.

La intercesión de Moisés “no excusa el pecado de su gente, no enumera presuntos méritos ni del pueblo ni suyos, pero sí apela a la gratuidad de Dios: un Dios libre, totalmente amor, que no cesa de buscar al que se aleja, que permanece siempre fiel a sí mismo y que ofrece al pecador la posibilidad de volver a Él”.

En resumen, Moisés pide a Dios “que se muestre más fuerte que el pecado y que la muerte, y con su oración provoca esta revelación divina”.

Darse a sí mismo

En referencia a la expresión que Moisés utiliza para interceder por el pueblo, “en la cima del monte cara a cara con Dios”, cuando le dice “si no, bórrame del Libro de la vida”, el Papa explicó que en este anonadamiento “los Padres de la Iglesia han visto una prefiguración de Cristo, que en la alta cima de la cruz realmente esta delante de Dios, no sólo como amigo sino como Hijo”.

Jesús, en la cruz, no sólo se ofrece - “bórrame” -, sino que “con su corazón traspasado se hace “borrar”, se convierte, como dice el mismo san Pablo, en pecado, lleva consigo nuestros pecados para salvarnos a nosotros: su intercesión no es sólo solidaridad, sino que se identifica con nosotros: nos lleva a todos en su cuerpo”.

Por ello, invitó a los presentes a creer que “Cristo está delante del rostro de Dios y reza por mí. Su oración en la Cruz es contemporánea a todos los hombres, contemporánea a mí: Él reza por mí, ha sufrido y sufre por mí, se ha identificado conmigo tomando nuestro cuerpo y el alma humana”.

Jesús “nos invita a entrar en esta identificación, a estar unidos a Él en nuestro deseo de ser un cuerpo, un espíritu con Él. Oremos al Señor para que esta identificación nos transforme, nos renueve, porque el perdón es renovación y transformación”.

0 Comments



Leave a Reply.

    Vaticano

    Información sobre el día a día del Vaticano

    Picture

    Archivos

    January 2021
    October 2020
    September 2020
    April 2020
    December 2019
    November 2019
    August 2019
    July 2019
    May 2019
    March 2019
    February 2019
    January 2019
    December 2018
    October 2017
    September 2017
    August 2017
    July 2017
    June 2017
    May 2017
    April 2017
    March 2017
    February 2017
    January 2017
    December 2016
    November 2016
    October 2016
    September 2016
    August 2016
    July 2016
    June 2016
    May 2016
    April 2016
    March 2016
    February 2016
    January 2016
    December 2015
    November 2015
    September 2015
    July 2015
    June 2015
    January 2015
    October 2014
    September 2014
    August 2014
    July 2014
    June 2014
    April 2014
    March 2014
    February 2014
    October 2013
    September 2013
    August 2013
    July 2013
    June 2013
    May 2013
    April 2013
    March 2013
    February 2013
    January 2013
    December 2012
    October 2012
    September 2012
    August 2012
    July 2012
    June 2012
    May 2012
    April 2012
    March 2012
    February 2012
    January 2012
    December 2011
    November 2011
    October 2011
    September 2011
    August 2011
    July 2011
    June 2011
    May 2011
    April 2011
    March 2011
    February 2011
    January 2011
    December 2010
    November 2010
    October 2010
    September 2010

    Categorias

    All

    RSS Feed

Política de Privacidad           /     Términos y Condiciones de Uso
Observatorio Vaticano/Koinonia Communication 2010-2021 © Derechos Reservados
Photo used under Creative Commons from timatymusic